Una de las historias que hizo huella en mí fue la de Ana María, directora de un colegio, quien estaba a poco de jubilarse, y decidió dominar la tecnología para cumplir sus sueños y obligaciones. Ella me reafirmó con su ejemplo, que nunca es tarde para aprender ni para conquistar lo que parece imposible.

A lo largo de los años, me capacité en programación, ciencia de datos, testing QA, inteligencia artificial, neuroeducación, y más. No para acumular títulos, sino para poder enseñar mejor y seguir creciendo como ser humano y como mentora.

Mi marca personal nace del deseo profundo de ayudarte a desarrollar tu potencial, progresar y superarte. Sé por experiencia que todos podemos lograr más de lo que creemos, si tenemos el acompañamiento correcto y creemos en nosotros mismos... y en Quien nos sostiene desde lo invisible.

Enseñar tecnología para mí es mucho más que explicar herramientas: es abrir caminos, fortalecer corazones y despertar sueños.

Hoy te invito a caminar este sendero juntos: con esperanza, con acción, con fe. Porque todo lo bueno está del otro lado de la determinación.